QUE 20 AÑOS NO SON NADA!

Ya lo decía Malevaje en uno de sus elepés (que bonita palabra esta), que veinte años no son nada. Así quedó claramente demostrado el pasado domingo. DOMINGO DE PREGÓN, con mayúsculas, el nuestro (como el Canal Sur, la nuestra, je, je, je).

 

Magnífica celebración de nuestro vigésimo aniversario. Creo que hubiera sido complicado encajar y disfrutar mejor los actos que se han celebrado en esta cuaresma. Caracterizados por la sencillez de nuestra tertulia hemos vivido (y creo que hablo en nombre de todos) momentos inolvidables (y si no, ya está Guillermo) y de difícil repetición.

 

Empezando por la modesta “operación kilo” que promovida por Doro consiguió aportar a las Hermanitas de los Pobres de San Benito más de 100 litros de leche y otros tantos de comida no perecedera. Muchas gracias a todos. Actuaciones como esta nos satisfacen y da sentido a nuestra asociación (aunque no esté dentro de sus objetivos iniciales). Dios quiera que repitamos en breve, ¿te atreves Doro?.

 

Poco después unos pocos contertulios nos acercamos a casa de Rosa para disfrutar del magnífico belén y, sobre todo, de su compañía y hospitalidad. Como todos los años, nos abrió su casa y nos acogió en ella como viene siendo habitual desde hace mucho tiempo y lo digo con conocimiento de causa.

 

El mes de enero nos lo pasamos haciendo cábalas sobre los “juegos de los pasitos”. Sin comentarios adicionales.

 

En febrero han tenido lugar los actos “menos íntimos” de la tertulia. Dentro de nuestro carácter habitual, me chirría llamarlos “actos públicos”. Magnífica acogida de la Hermandad del Silencio, personalizada en la persona de Eduardo del Rey, que nos deleitó con una breve disertación en relación a la tertulia, el cartel y la hermandad. Magnífico rato en El Serranito, con las sevillanas maneras del tapeo de pie, que permite la participación y la interlocución con la totalidad del grupo. Sí ya sé, es lo normal pero para nosotros, no ocurre lo mismo en otras partes de nuestra España. Muchas gracias Eduardo. No quisiera dejar pasar la ocasión sin señalar la elección por segundo año consecutivo, de un cartel atrevido y rompedor. No debiéramos perder este atrevimiento que no nos hace apartarnos ni un milímetro del clasicismo y el “enterismo” cofrade. 

 

Poco después, Javier mostró nuevamente su grado de conocimiento de nuestra semana mayor en su charla en la Peña Sevillista San Bernardo donde somos recibidos como si fuera nuestra propia casa. Agradecidos a Javier y a la peña. Es el otro acto externo de la tertulia y se consolida como habitual en la programación cultural de los sevillistas. Habrá que buscar temas Javier.

 

El mes acabó con una visita a un clásico cofrade de San Lorenzo. Casa Ricardo fue el escenario perfecto para un encuentro de celebración. 20 años no se cumplen todos los días y bien merecía el cambio de ubicación de nuestro encuentro semanal. Sólo un pero, estaba hasta la bola. Magnífico libro de fotos, gran recuerdo. Coincidencia agradable en la copa posterior en El Sanedrín, donde se presentaba su cartel.

 

Especialmente activo ha sido este mes para nuestro fotógrafo de cabecera y administrador del blog que nos ha deleitado con magníficas entradas de cultos que algunos no tuvimos oportunidad de disfrutar. Gracias Daniel.

 

Y para rematar, el pasado domingo, el PREGÓN, nuestro pregón. Acto anual por excelencia de la tertulia, este año ha venido a culminar una magnífica cuaresma. Sobre nuestro PREGONERO (también con mayúsculas) ¿qué puedo añadir a las palabras de Guillermo y Doro?. Diego es ya patrimonio de nuestra tertulia, patrimonio inmaterial que llevamos en nuestros corazones. Madurez y buen gusto en su pregón, con su pizca de humor y su ración de solidaridad. Más de uno nos vimos reflejados en “su” enamoramiento de la ciudad. Ganas tengo de pasarlo a mp3 para  poder re-disfrutarlo una y otra vez. Contagiados y eufóricos de ánimo disfrutamos de una magnífica tarde con charlas animadas por doquier y con el encuentro, inesperado por infrecuente, de los tres fundadores.

 

Bueno, como decía al principio, 20 años no son nada. Tal y como he tenido oportunidad de comentar con alguno de vosotros, cuando iniciamos este proyecto no podíamos imaginar que dos décadas después mantendría toda su vigencia, que digo mantener, la supera con creces. Cierto que no teníamos un horizonte temporal pero lo achaco a la propia inconsciencia juvenil (que es la que mantenemos en la actualidad, ¿no?). Sólo teníamos ilusión y mucho amor por nuestra Semana Santa y nuestra ciudad. La misma ilusión que tengo ahora para que la tertulia dure otros 20 años (como mínimo) y poder compartirlos con vosotros. Gracias amigos.

 

J.G.Z.