28 de febrero de 2018

XXV ANIVERSARIO - CUARESMA EN LA PEÑA SEVILLISTA SAN BERNARDO

Dentro de los actos de nuestra querida Peña Sevillista San Bernardo organiza con motivo de la Cuaresma 2018, ayer se pudo disfrutar de una charla conferencia ilustrada con diapositivas de nuestro querido contertulio Javier Hiraldo que versó sobre "Imaginería del Siglo XX , innovación y tradición".
Todos los asistentes pudieron llevarse de recuerdo a modo de obsequio el cartel que nuestra tertulia ha editado este XXV Aniversario de nuestra fundación. 
Posteriormente, pudimos conversar en torno a unos aperitivos. 












4 de febrero de 2018

XXV ANIVERSARIO - TEXTO PRESENTACIÓN CARTEL TERTULIA A PULSO 2018




San Juan de la Palma (Sevilla)
Jueves-1 de febrero-2018




Por  ANGÉLICO  Ruiz  Morales

1-“DEDICATORIA”

         A RAFAEL, un ángel que por aquí anda y tanto me enseñó de esto, con versos de nuestro Hermano Mayor:

Todo está por estrenar,
despierta cuerpo dormido
de tanta espera, que aguarda
límpido el cielo bruñido.
Todo está por estrenar,
afán, lapso detenido,
nuevos besos, ilusiones,
recuerdan que sigues vivo.
Todo está por estrenar,
vencejos silban sus trinos,
rizadas palmas aclaman
pasados gozos vividos.
Todo está por estrenar,
luces, colores, sonidos,
de los que están por llegar,
¿oyes cercanos los ruidos?
Todo está por estrenar,
la vida fugaz ya ha sido,
tu silencio, mi amargura,
nuestro corazón herido.


2-“ ¡LARGA VIDA A LA AMISTAD!”

Como el mago ilusionista que alza sorpresivo el pañuelo y descubre su hallazgo; como el niño adulto ilusionado que descorre expectante la cortina la mañana del Domingo más esperado del año y comprueba que el celeste es el del celeste que todos queremos; acabamos de encontrarnos un año más, y van veinticinco, el cartel con el que la Tertulia “A PULSO” se presenta a Sevilla y homenajea a sus hermandades y a esa “Semana” por la que algunos contamos la vida. Porque, como dijo otro poeta, “la vida es una semana”. Y en ese gesto de deslizar el lienzo y así dar luz a un secreto guardado en el arca de las ilusiones, como si desenvolviéramos el regalo con que alguien nos agasaja y nos demuestra que le somos importantes, en ese gesto viaja mucho más que, simplemente, iluminar una imagen, una estampa, más o menos bella, más o menos epítome, de lo que representa.  En ese gesto se acaba de descorrer, de nuevo, y van veinticinco, el valor más auténtico, el que da sentido a esta Tertulia, a sus miembros y a su transitar, un cuarto de siglo ya, entre amenas charlas, convivencias, pregones y obras de caridad. Ese valor del que hablo es el valor de la amistad. AMISTAD. Hermosa palabra de origen latino “AMAR” o bien griego “SIN MI YO”. O sea, desprendimiento, afecto puro, desinteresado, compartido, que nace y se fortalece con el trato. Quien tiene un amigo está probando de verdad la felicidad más honda, la de dar sin esperar nada. Amigos de “A PULSO”, amigos y hermanos de la AMARGURA: esta noche de invierno no necesito chaleco, abrigo,  bufanda, ni guantes… Estoy, estamos, completamente arropados. Absolutamente dichoso y agradecido por participar activamente en este acto en el que sobrevuela baja, emana fragante y palpita intensa la dicha de amar y sentirse amado.

¡LARGA VIDA A LA TERTULIA!  ¡LARGA VIDA A LA HERMANDAD!
¡LARGA VIDA A LA AMISTAD!

3-“BODAS DE PLATA EN SAN JUAN DE LA PALMA”

En los primeros años de los noventa, un grupo de buenas personas, bien jóvenes aún y todavía en esa etapa en la que casi todo son sueños, “castillos en el aire”, en un tiempo de encrucijadas, de toma de decisiones que pudieron ser trascendentales, en esa vorágine de estudios, currículos, noviazgos, primeros empleos… resuelven formalizar, oficializar, lo que venía siendo espontáneo y así dar continuidad y sentido a esas tertulias de buen beber, buen yantar y bien conversar en el vivaracho entorno de la Alfalfa sevillana. Y lo consiguen, ojo, cuando para quedar con los amigos había que llamar por teléfono –el fijo, por supuesto- o bastaba una palabra dada la semana anterior. Desde entonces, ahí siguen. Veinticinco años completos y sus cientos de encuentros ya compartiendo lo que más queremos. Ahora empeñados en la posible continuidad que a tan preciosa dedicación puedan dar los hijos, esos que apenas ni eran proyectos cuando todo empezaba. Y para las Bodas de Plata, un cortejo blanco y rojo, una canastilla dorada y una corona de oro: Todo nos ha conducido a San Juan de la Palma.          
       
NADA ES CASUALIDAD…



4-“SEÑALES…”

Sé que hoy es un día grande para “A PULSO”. Y sé que sus miembros van a escribir con cuidadas letras algunos renglones en el libro de sus días con el acto de esta noche de febrero. Y sé que están felices. Y agradecidos… No cabe otra cosa para quienes, privilegiados, llegamos al mundo ungidos del perfume de azahar. Para quienes habrán dado sus primeros torpes pasos por las naves de una parroquia. Para quienes vemos en el azul pavo de una tarde de otoño un manto de terciopelo y ruán negro en el cielo de la madrugada. Para quienes tener un hijo es una oportunidad de transmitir un legado de emociones. Para quienes volvemos a ver la cara de un padre o una madre que se fueron en el bendito rostro del Señor y la Virgen de sus devociones.
Y cómo nos alimenta la ilusión a los sevillanos. Una ilusión que aquí tiene sus nombres y sus apellidos: “Lotería de Navidad”, “Heraldo Real”, ”Cabalgata de Reyes Magos”, “Viernes de Dolores”, “Domingo de Ramos”, “Lunes de Pescaíto”… Y todo nos va llegando vía anuncios, anticipos que nos hacen presentir lo que todavía no llegó pero sabemos llegará.
Como la aurora a la amanecida.
Como un perfumado botón blanco sobre fondo verde de naranjo a la primavera.
Como ese primer nazareno vislumbrado desde el balcón del “tiempo sin tiempo” al Domingo de Ramos.
Como un desfilar de lonas a rayas a la Feria de Abril.
Como una alborada púrpura y miel entre pinos a una romería en Doñana.
Como la humareda del castañero a los fríos de invierno.
Como el ingenuo y monocorde soniquete de los niños cantores de “El Gordo” a la Navidad.
Como una estrella brillando espesamente el 4 de enero a esa noche en que muchos vemos que vibra la ilusión en el aire de Melchor, Gaspar y Baltasar…

como todo ello, así el cartel de “A  PULSO” a una nueva Cuaresma. Sí, lo hemos convertido ya en otro rito, en tradición, como hacemos aquí con lo que ocurre aunque sólo sea dos veces siempre que nos ilumine, nos una más a lo que nos es trascendental y, en definitiva, nos haga felices. Nos rendimos pues a otra evidencia, a otra señal,  de que ya está pasando lo que queremos que pase. Privilegio absoluto…

5-“TODOS UNO Y A UNA”

         Si los espejos se emplean para vernos reflejados los rostros, el arte debe de ser el espejo en el que vemos el alma del artista. No hablo de la manía de hoy, vicio ya casi, de fotografiarlo todo, una y otra y otra vez, decenas de fotos sin sentido alguno, atracón de imágenes no seleccionadas que nadie verá después, fruto de esta absurda manera de vivir sin vivir, de esta prodigalidad vacía, más cara a la galería de compartir con prisas en las redes que a olisquear, lamer, saborear, masticar lento y tragar despacito cada momento, como se bebe el buen vino, lo que quizás debería ser vivir. Hablo de la fotografía buscada, seleccionada, esperada, a veces, incluso años. Esa fotografía sí que es arte. Y a través del arte conquistamos (¿o nos conquista…?) la Belleza. Como el escultor que ya vio antes de cincelar el volumen la imagen que quiere extraer y ahora sólo tiene que ir eliminando pacientemente la masa que sobra, así el fotógrafo, nuestro artista, buscó este último Domingo de Ramos nuestro albo cortejo con esta estampa en su mente. El reloj oficial  ya marcaría Lunes Santo… pero aquí sabemos que sigue siendo Domingo de Ramos mientras el nazareno de la Amargura que vive más lejos no deja su hábito blanco sobre la cama y le pide a Dios que sea “hasta el año que viene”.
Estamos justo en ese momento bisagra, esa transición en la que hemos abandonado las callejuelas del centro y aún no llegamos a lo que ya sabemos “barrio”. Acabamos de dejar Cuna y están a punto de “acunarnos” con sus cantos y rezos sublimes unos ángeles de hábitos marrones a la puerta de un convento encalado.
Imagino al amigo fotógrafo unos minutos antes sorteando público, con ese pellizco del que se sabe a punto de conseguir el hallazgo buscado aunque nadie se lo asegure.
Y lo imagino llegando justo al epicentro en que ahora también nuestros ojos contemplan la escena. Late álgida la noche del Domingo de Ramos. Como ríos de caudal lento, el resto de cofradías también vuelven al mar de sus feligresías y templos. Pero Daniel, “González” por su padre y “Zafra” por su madre, sabría que su destino era pisar los añejos adoquines de Laraña justo en ese instante, en este instante…





Hay una bulla justa. Nos flanquea la gran fachada de la iglesia de la Anunciación y una nube de incienso envolvente se eleva a un techo de cristal “anunciando” Su llegada, perfumando al Rey de reyes. Llegaste a tiempo, amigo fotógrafo. Casi que escuchamos los tambores de los de la gorra blanca, los amigos de la Banda de las Tres Caídas. Casi que suenan los primeros toques inconfundibles de “Silencio Blanco”, la melodía de “En tus lágrimas, Amargura” o “El Desprecio de Herodes”.  Y estamos oyendo la voz de Manuel y Antonio Villanueva (“¡Ole mi gente ´güena´ ahí!”) dirigiendo el imponente barco dorado y llamando secos y rotundos al martillo. Y miramos y vemos, aunque no esté, porque nos lo sabemos todo de memoria, un palacio burdeos, plata y oro para la más mimada de la casa, Mara, nuestra Virgen de la Amargura, que viene río abajo por Cuna… ¡Miradla cómo viene, que va rompiendo el aire, que va enamorando a la ciudad entera y que va venciendo triunfal, sin discusión, a la noche!  
Y encerrando en amores al Señor, dos nazarenos de blanco zurbanesco, cola al brazo, cruz de Malta sobre fondo carmesí, del mismo tono al de los claveles que está pisando Jesús. No busquen más, que no hay… No cabe más elegancia. Lo siento, Nicolás, pero ese nazareno que no porta ni sostiene la vara, sino que la abraza con las dos manos, no eres tú. Lo siento, César… tampoco eres tú el que con su mano izquierda agarra el antifaz para ver algo mejor. Ni Nicolás ni César… Esos nazarenos sois vosotros y somos todos los hermanos de San Juan de la Palma… Da igual si vara de presidencia, cruz de penitente, cirio o palermo. Da igual si canasto de diputado, si naveta o si cirial, cruz parroquial o incensario. Si insignia, cántaro de agua, carrito o manos vacías, traje, corbata y medalla al pecho. Da igual si hombre o mujer, niño, adolescente, joven o ya de los que tenemos la cruz de guía o hasta la cofradía de nuestra vida fuera de la catedral y camino de la morada definitiva.  Da igual. Ese día somos todos y uno. Somos los que están, los que estarán y los que estuvieron. Todos uno y a una rindiendo culto externo e interno de amor a nuestros Sagrados Titulares. 



6-“EL SECRETO DE UNA SONRISA”

        Y en este ambiente familiar, donde sólo veo familia, amigos y hermanos, dejadme que os confiese un secreto…
        En ese halo de seriedad, señorío, solemnidad, silencio… de rigor, ascetismo y mística que desprende la cofradía de la Amargura, al otro lado del antifaz de cada miembro del cortejo hay sitio también para la sonrisa, esa sonrisa de satisfacción, esa sonrisa del que se sabe humildemente orgulloso de una elección (¿o de haber sido elegido…?). Esa sonrisa del que se sabe “barrio”, del que se sabe acompañado por decenas de infantes de doce años que hacen estación de penitencia por primera vez. Esa sonrisa del que se sabe cumpliendo un rito en el que, desprendido de uno mismo, desprendido de una identidad, en el más absoluto anonimato, vuelve a dar vida a los que también formaron parte de este pequeño gran mundo que es la Hermandad y ya se fueron a vida mejor.
Llevamos la alegría de aquel cuya fe le dicta la certeza de que todo acaba bien. Llamamos a nuestra Virgen “Amargura”; pero para nosotros no es la “Virgen de la Amargura”, sino “LA VIRGEN QUE QUITA TODA AMARGURA”, la que consuela, la que alivia toda pena, la que da sentido a tantas cosas inefables, la que mantiene en el alma una llama encendida cuando todo parece apagarse…




7-“EL OTRO, SIEMPRE EL OTRO”

Y dejo para el final el eje y centro de todo, del cartel, de la Hermandad, de nuestra fe, de la vida: EL SEÑOR.
Veo al Señor del Silencio en el Desprecio de Herodes en la maravillosa foto del cartel 2018 de “A PULSO” y vuelvo a ver al Niño Jesús en el pobre portalito de Belén. Dios humilde que se hace Carne de Niño para salvar al mundo e iluminarnos sencillamente el camino. Y Dios humilde que calla porque sabe que ha de hacerlo y porque sabe el final. Cuánto nos dice ese silencio que acaba siendo locuaz.
Veo el vigésimo quinto cartel de la tertulia “A PULSO” y aprendo la lección más alta que nos enseña el Señor: desprenderse de uno mismo (vuelvo al “sin mi yo” del inicio), sencillez, entrega…
EL OTRO, SIEMPRE EL OTRO…
           

8-“BIENVENIDA, BELLEZA”

Así que…
¡bienvenido cartel de Semana Santa!
¡Bienvenida  emoción de instantánea!
¡Bienvenidos siempre, amigos, bienvenidos hermanos!
¡Bienvenida celebración al sevillano modo de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo!
Y seas muy bienvenida, BELLEZA.
Este cartel hierve en ella y por eso este cartel nos tiene que hacer mejores.
            Permitidme que termine proponiéndoos un pequeño gesto. Contemplen el cartel. Hagan un imaginario zoom de acercamiento hacia la parte superior, justo a la derecha del primer candelabro. Vemos unas manos. Esas manos están atadas… pero son las manos que mueven el Mundo.
           

Muchas gracias.





2 de febrero de 2018

XXV ANIVERSARIO - CARTEL TERTULIA COFRADE A PULSO 2018




XXV ANIVERSARIO - PRESENTACIÓN CARTEL A PULSO 2018


Ayer noche, en la casa hermandad de La Amargura se llevó a cabo la presentación del Cartel de nuestro XXV Aniversario que recoge la foto (obra de Daniel González Zafra) de Nuestro Padre Jesús del Silencio en su estación de Penitencia del pasado año 2017 por la calle Laraña. 
Abrió el acto el Hermano Mayor de la corporación del Domingo de Ramos, D. José María Pedernal Álvarez, al que solo nos cabe dar las gracias por su calurosa acogida, y la siempre dispuesta colaboración de su Junta de Gobierno para que este acto celebrara. Tras él, tomó la palabra D. Juan Manuel Payán, Presidente de nuestra tertulia, que hizo un breve repaso sobre nuestra trayectoria en estos 25 años.
La presentación del Cartel la hizo D.Ángelico Ruiz Morales, maestro de profesión, hermano de de la Amargura, amigo y pregonero que fue de nuestra tertulia. 
Teníamos claro que era un éxito seguro su presentación, pero no dejó de sorprendernos su palabra pausada, serena y profunda que nos adentró en la esencia de La Amargura y que sin duda nuestro cartel pretende reflejar.
Tras la presentación pudimos disfrutar de un buen rato de "tertulia" y un refrigerio en la misma casa hermandad. 
Una vez más, gracias a la Junta de Gobierno y a su hermano mayor por hacernos sentir como en casa en un año tan especial para nuestra tertulia.