CRONICAS DEPORTIVAS: A PULSO SIGUE IMPARABLE

Nuestro prolífico "Juan Tribuna" nos manda esta mavarillosa crónica de la actividad deportiva de A Pulso.

4-2, la realidad sigue superando a la mejor de las ficciones. El equipo de la tertulia sigue imparable.

        Como ya se decía en los mentideros sevillanos desde el último partido, una vez que este equipo había saboreado la victoria, ya no la soltaría. Y así ha sido, vaya que sí, pero además rozando la gloria en lo más alto. Nuestro equipo va camino de su particular Eindhoven y vive los mejores momentos de su historia. ¿Un título este año? Quién sabe, a lo mejor cae más de uno con la nueva presidencia, que dicen será muy ambiciosa.

        El encuentro empezó como le gusta a los nuestros, esto es, con superioridad, no ya porque fuéramos uno más, lo cual resulta anecdótico, sino porque éramos superiores en todos los planos. Rápidamente los rivales cambiaron una de las fichas federativas y se llevaron al héroe de la ultima jornada, clásico nazareno donde los haya, igualándose el número de judaores.

        Y contra todo pronóstico, el equipo siguió jugando como si la mejor versión de la selección epañola se tratara. Se habla, se vislumbra que no es casualidad que ambos equipos - el nuestro de la tertulia y la selección campeona del mundo - vistan igual, camisola roja y calzón azul. No, no existen las casualidades, ambos equipos son tan parecidos...¿y qué fue antes, el huevo o la gallina? ¿fue Diego el otro día el nuevo Piqué? ¿es Rafa o es Iniesta? ¿quién es Puyol y quién Nacho? ¿Luismi Capdevila?

        En fin, preguntas sin repuesta al aire de nuestra ciudad ya en puertas de la primavera. Lo cierto es que el equipo se puso mediado el partido 4-0, con sucesivos goles de Ale (gran partido el suyo, leyendo mucho mejor el partido que los correos anteriores), de nuestro killer (cuya leyenda se agiganta y ya está en su demoledora media de un gol por partido), de Luismi (que volvió felizmente al gol de nuevo, como los viejos delanteros que nunca mueren, aunque reconvertidos ahora a laterales de largo recorrido) y Sergio, éste último de manera apoteósica desde el medio campo en una vaselina incríble, que motivó - unido a que era la primera vez que nos poníamos en un tanteo así de 4-0, un tanteo tan de Eindhoven - que a algunos se les nublara la vista y aflorara alguna lágirma incipiente de emoción.

        El equipo era una máquina con esa nueva estrategia de jugar sin referencia fija arriba y a cambio sí con dos centrales, magníficas las prestaciones de Pique y Pujol, quiero decir Diego y Nacho; con dúo de puñales de Ale y Rafa, el día de su cumpleaños, poniendo balones de gol sin cesar y comiéndose el centr del campo; con los porteros a un nivel altísimo como Sergio, que nos recordó tanto a Buyo, aún con bigote claro; con Luismi percutiendo a banda cambiada la segunda parte, o con Jose, que ocupó su banda entera sin protestar, más allá de un ligero cambio de impresiones, en un derroche físico inconmesurable y que realizó las gestiones adecuadas, como peso pesado del equipo en su nueva condición de presidenciable aclamado por su público. Y con equilibrio que da el pegamento del equipo, ayer nuestro killer, hoy el pegamento de las líneas.

        Decíamos que Jose Lara como parte del núcelo duro de la tertulia - presidente dixit - tuvo que intermediar con el equipo contrario y, haciendo gala de sus poderes, les ofreció una derrota digna a los rivales. Efectivamente tras la vaselina y alborozo general que suponía el 4-0, pareció detectarse un motín y amago de retirada en el rival. Nuestro lateral izquierdo, en su nuevo e importantísimo papel, medió ofrecindo como decía retener el escándalo de una goleada y permitiéndoles maquillar el resultado hasta ese final 4-2, merced a dos goles de Carlos, gran futbolista y mejor persona, por cierto.

        Cuando recuperemos a nuestros lesionados Fali o Alejandro, vuelvan nuestros porteros, el ángel volador y su suplente, el míitico Ligre, retonen los cedidos Alberto o Joaquín, o incluso aparezca alguno más como Vicente, con su dorsal nº 69, ¿quién parará a este equipo?